Los mineros no creen a Sebastián y anuncian huelga general y un encierro

La reunión entre los sindicatos mineros y el ministro de Industria, Miguel Sebastián, terminó ayer en fracaso. Habrá huelga general de la minería (los días 22, 23, 29 y 30 de septiembre) y un encierro en la propia sede del Ministerio. Y los sindicatos anunciaron estas medidas pese a que el ministro les aseguró en las más de tres horas de reunión que la Comisión Europea iba a desbloquear el decreto de ayudas. Sin embargo, los representantes de los mineros creen que se ha acabado el crédito del Gobierno y cuestionaron la credibilidad que suponía que diferentes presidentes autonómicos (incluido el de Aragón) fuesen dando fechas en las que supuestamente iba a acabar el conflicto.

El final de la reunión parece que estaba ya previsto antes de que empezase, según plantearon algunas fuentes. En este sentido, de nada sirvió que el ministro Sebastián asegurase a los sindicatos que había conseguido ya el visto bueno del presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, del responsable del área de Competencia, del de Energía y los serviciso jurídicos. De hecho, según informó Sebastián en rueda de prensa tras la reunión, lo que quedaba era ya solo "una cuestión procedimental". Esta cuestión es que se someta a votación en el Colegio de Comisarios, lo que podría producirse el 29 de septiembre.

Pese a tanta concreción, los sindicatos no le creyeron. "Un presidente autonómico aseguró que se iban a aprobar esta semana", insistió uno de los representantes sindicales para constatar que, a su juicio, no hay un plazo firme para resolver el conflicto, premisa que exigían para no plantear nuevas medidas.

Sebastián, aunque se mostró muy seguro, evitó poner "el cien por cien de seguridad en que se aprobará en septiembre", ya que dijo que al no depender de ellos siempre puede ocurrir algún suceso, aunque dejó claro que nada indica eso. "Nos quedaríamos muy sorprendidos y apenados", explicó ante esa hipótesis. "Tenemos una sintonía con Bruselas", aseveró.

La huelga general que anunciaron no evitó que los sindicatos considerasen que había "buena intención" por parte del Gobierno, aunque insistieron con la credibilidad. También dieron bastante importancia al conflicto de los mineros que no cobran, en Asturias y León.

Pero antes de la intervención del ministro hubo también otras declaraciones que trataron de enfocar el asunto. El primero que tomó la palabra fue el comisario europeo de Competencia, Joaquín Almunia. Eran apenas las diez de la mañana cuando aseguraba que "la negociación va por buen camino". Sin embargo, dicho esto dejó claro que "no estamos aún en el momento de que se tome una posición".

Almunia resaltó que el problema del carbón, tal como se plantea en Bruselas, es "endiabladamente complicado". El comisario español resaltó que él era el único miembro del Colegio de Comisarios que tenía un conocimiento profundo previo del asunto del carbón y dio a antender que muchos de sus compañeros que tienen que decidir no acababan de ver claro el decreto español. En cualquier caso, sí indicó que tras las malas perspectivas iniciales, ahora las perspectivas eran bastante mejores.


saludos

fuente Heraldo de Aragon